El
yoga es una disciplina que nos ayuda a contactar con el Intimo o
Maestro Interior, es también la unión del alma individual con el
Gran Alma Divina. El yoga es un trabajo espiritual
que conduce a la
liberación final. Para esta liberación se requiere la alineación
vibratoria de nuestros tres cuerpos inferiores
(físico-emocional-mental) para que sean el canal perfecto donde se
manifieste la luz del Alma. Para ello el yoga cuenta con la ayuda de los ocho pasos (yama, niyama, asanas, pranayama, dhyana, dharana
y Samadhi) de los que habla Patanjali. Pero, para simplificar el
trabajo diario, pondremos atención en algunas practicas:
- Atención Serena que conlleva la Observación profunda de los hechos de forma expectante y en actitud flexible que se desarrolla desde el corazón.
- Auto-observación constante o recuerdo de sí mismo. Es necesario crear un centro de Conciencia Permanente en el centro de la cabeza. Debemos recordar siempre que somos Almas Divinas en un cuerpo físico.
- Estudio de los sueños o Yoga del sueño que desarrollamos más abajo.
- Servicio desinteresado o Karma yoga.
- Lectura y reflexión adecuadas o Gnani yoga.
- Ejercicio físico consciente: asanas, pranayamas, bandhas... (Hatha yoga)
- Meditación y Activación de los Centros Energéticos o Chakras
Sueño
consciente
¿Dónde está nuestra conciencia
durante las horas en que permanecemos durmiendo? ¿dónde está
nuestra Alma? ¿qué estamos haciendo y con quién estamos?...
Pasamos
un tercio de vida en otros mundos sin saber que hacemos. Cuando
dormimos perdemos la continuidad de la conciencia, y es debido a la
falta de INTEGRACIÓN entre los diversos mecanismos internos
del hombre. Esto se puede subsanar mediante el trabajo para DESPERTAR
CONCIENCIA en todo lugar y estado en que nos
encontremos.
El
mundo interior e invisible es más extenso que el mundo externo
percibido con nuestros cinco sentidos. En los planos internos podemos
aprender mucho, continuar nuestro trabajo espiritual de
autoconocimiento y comprensión, ayudar a otros seres, y realizar
otras empresas elevadas.
Platón
dijo que el hombre se conoce por sus sueños.
Los
sueños son inconscientes para la mayoría de personas, no saben
dominarlos y son olvidados. Existen muchas clases diferentes de
sueños debido a que están relacionados con cada uno de los centros
psíquicos del organismo humano. Así pues, existen sueños
intelectuales, emocionales y motores-instintivos.
La
mayoría de sueños están vinculados al centro instintivo-motor y
son el eco de la cosas vistas y vividas durante el día. Los sueños
son repetición astral de lo que hemos hecho durante la jornada
anterior.
Nuestros
centros superiores e invisibles tratan de enviar sus mensajes a
través de los sueños y para ello nos informan del estado en que nos
encontramos a través de imágenes y símbolos cuyo lenguaje es
comparable al de las parábolas. Nuestro trabajo personal consiste en
captarlos conscientemente.
Cuando
nos acostamos para descansar -no “dormir”- estamos
preparándonos para realizar un viaje a los mundos sutiles del
universo. Este evento es muy importante hacerlo consciente, ya que de
esta actividad depende lo beneficioso que pueda ser nuestro descanso,
y sobre todo para el aprovechamiento de nuestro trabajo espiritual.
¿Como
practicar el yoga del sueño?
Cuando
se anhela la experiencia mística directa, es
imprescindible practicar el Yoga del sueño. A continuación se
exponen condiciones favorables que debemos desarrollar para el
recuerdo y comprensión de las experiencias vividas durante el
sueño:
- Hacer La última comida del día ligera para evitar una digestión pesada. Sobre todo evitar las proteínas de origen animal.
- Poner atención en el estado que nos encontramos antes de acostarnos.
- La habitación debe ser agradable, bien perfumada y ventilada. La cabecera de la cama orientada al norte para aprovechar la corriente magnética que fluye de Sur a Norte en el Planeta Tierra. El colchón ni duro ni demasiado blando. La almohada perfumada con el aroma favorito. La cama silenciosa aunque nos movamos.
- Aquietar la mente es muy importante para entrar conscientes al mundo de los sueños. Algunos recomiendan escuchar a Wagner, Mozart, Beeethoven o Chopin para ayudar a detener el proceso de los pensamientos. En Yoga y Zen se aconseja observar el proceso de entrada y salida del aire por las fosas nasales. Entrenarse en la meditación diaria ayuda enormemente a entrar conscientes en el mundo astral.
- Hacer la recapitulación de los acontecimientos del día, sentados y antes de acostarse. Ello ayuda a descongestionar la psiquis, y a recuperar casi las dos primeras horas del sueño que utiliza el subconsciente para reorganizar y recapitular inconscientemente los eventos y circunstancias del día.
- Abrigarse y acostarse boca arriba en la cama, con la luz apagada y las manos sobre el plexo solar, se cierran los ojos para aquietar cuerpo y mente.
- Pedir con fe y humildad ayuda al Guía Espiritual, a los Maestros, a los Ángeles etc., para que le despierten la Conciencia.
- Los últimos pensamientos son importantes, se recomienda sumergirse en el descanso con pensamientos elevados. De la calidad vibratoria con la que nos dormimos, dependerá directamente el plano y subplano al que iremos, con el consiguiente efecto. Seres de planos inferiores pueden esclavizarnos y dañar nuestra mente como les ocurre a los alcohólicos crónicos.
- Situar la conciencia en la parte más elevada de la cabeza, respirar de forma consciente y escuchar el sonido del silencio en nuestro interior. Desde allí dejarse introducir suavemente en los mundos internos...
- No realizar esta practica cuando se está enfermo o enfadado. Cuando se es principiante, este trabajo toma grandes reservas de energía y la enfermedad se agrava.
- Al despertar, debemos procurar no movernos para no perder los recuerdos de todos los sueños. Después anotar los detalles de todo lo que recordemos en una libreta para tal fin. El ejercicio comienza con la última imagen que recordamos antes de regresar al estado de vigilia. Cuando no recordemos nada, hay que iniciar una retrospección en base al primer pensamiento en el instante de despertar. Ese está asociado siempre al último sueño.
- Cada mes repasaremos los apuntes de la libreta para verificar el adelanto en nuestros recuerdos. Los sueños y las proyecciones astrales se asemejan en que la claridad de ambos tiende a desvanecerse después de despertarse, al menos que la experiencia sea registrada en detalle. Cuando logremos la memoria perfecta de las experiencias en el sueño, estaremos listos para ir más adelante en el yoga del sueño y llegar a la proyección astral donde necesitaremos pedir Protección, Guía y Servicio (permiso para colaborar o ayudar en lo que haga falta).
- El estudio y análisis profundo de los símbolos nos revelarán el significado de nuestros sueños. Además nos ayudará a descubrir el sueño o símbolo que siempre se repite y que se trata del elemento iniciador que, utilizado adecuadamente, conduce al despertar de la Conciencia. Meditar en el elemento iniciador antes de dormir ayuda a entrar conscientemente en los sueños.
- El paso final será dirigir a voluntad el contenido de los sueños, con plena lucidez y control sobre los mismos. Debemos ser espectadores y actores de nuestros sueños. En ese mundo podemos resolver cualquier conflicto psicológico que bloquee nuestra paz interna. En el mundo onírico podemos devolver el puñetazo que nos dieron en el día, resolver discusiones imposibles en la realidad, cambiar situaciones que no nos gustan de nuestra vida, dar una paliza a alguien que nos hace la vida imposible en el trabajo,... y así poco a poco, iremos sacando del subconsciente las tensiones y represiones acumuladas en el pasado o durante el día, para liberar nuestras cargas psíquicas. Cuerpo y mente serán sanados!
Esta
disciplina es para personas constantes en sus practicas ya que
requiere de paciencia y grandes esfuerzos. La disolución de los
sueños y de los resortes psicológicos que los originan conducen al
Verdadero Despertar. Comprendiendo y desintegrando los sueños se
puede acceder al verdadero estado de Iluminación. Es evidente que si
se despierta a la Iluminación los sueños concluyen.
No
debe confundirse el “el sueño consciente” con el “viaje
astral”. En los sueños conscientes que aprendemos con el yoga de
los sueños, podemos controlar las reacciones de los seres que
aparecen, pues al ser creados por nuestra voluntad somos dueños de
lo que ocurre. A la proyección astral se puede acceder a través del
sueño consciente. Los seres del mundo astral son libres de
reaccionar ante nosotros pues son reales en esa dimensión, no son
nuestras creaciones.
Debemos
comprender que la disciplina del sueño es una preparación esotérica
para el sueño final: la muerte. Habiendo muerto muchas veces
cada noche de nuestra vida, aprendemos a vivir conscientes en ese
estado, y así también el instante del abandono permanente de este
cuerpo pasaremos con la misma facilidad en que nos introducimos
voluntariamente en el mundo del sueño cada día.
Referencias:
Samael
Aun Weor, “La Doctrina Secreta de Anahuac”
Edaín
McCoy, “Proyección Astral para Principiantes”
Redondo
Segura, “La Luz Diamantina”
COMO DESARROLLAR INTELIGENCIA ESPIRITUAL
ResponderEliminarEN LA CONDUCCION DIARIA
Cada señalización luminosa es un acto de conciencia
Ejemplo:
Ceder el paso a un peatón.
Ceder el paso a un vehículo en su incorporación.
Poner un intermitente
Cada vez que cedes el paso a un peatón
o persona en la conducción estas haciendo un acto de conciencia.
Imagina los que te pierdes en cada trayecto del día.
Trabaja tu inteligencia para desarrollar conciencia.
Atentamente:
Joaquin Gorreta 55 años